en el signo deVicino

Palio de Sant’Anselmo

Desde hace algún tiempo, los visitantes que acuden a Bomarzo los días 23, 24 y 25 de abril no dejan de aumentar porque se sienten atraídos por el «Palio» que se corre entre los cinco barrios en los que se divide la ciudad. Los distritos son: Dentro, el más antiguo, Borgo, Poggio, Croci y Madonna del Piano.

La carrera del Palio se ha restablecido recientemente, pero sabemos por fuentes antiguas que ya se corría en el siglo XVII. De hecho, en aquella época había dos palii, uno el 24 y otro el 25 de abril, días en los que se celebra al patrón de Bomarzo, el obispo Anselmo, que vivió la época oscura de las invasiones godas y cuya intervención salvó varias veces a «su» pueblo del peligro bárbaro.

Sabemos por los libros antiguos que los palii se pagaban en baiocchi y que se designaba especialmente a un notable de la ciudad para organizar este evento. A lo largo de los siglos, los palii fueron corriendo hasta quedar reducidos a simples carreras de caballos. Pero el amor por las tradiciones y por estas nobles bestias, que siempre han estado en el alma de los habitantes de Bomarzo, ha hecho que el 25 de abril se renueve la disputa. Anselmo para el Dentro, Misericordia para el Borgo, Madonna delle Grazie para el Poggio, Cristo Risorto para el Croci, y Madonna del Piano para la contrada del mismo nombre.

La tarde del 25 de abril comienza con un desfile en trajes del siglo XVI, acompañado por la banda local, que sale del castillo Orsini. cruza todo el país. A lo largo del recorrido, el desfile, que evoca a los personajes de la novela «Bomarzo» del escritor Manuel Muica Lainez, se enriquece con nuevos participantes: niños y niñas ataviados con trajes locales portan el famoso «Biscotto di S. Anselmo», que se ofrece y reparte a los presentes. Anselmo», que se ofrece y distribuye a los presentes, las abanderadas, los Priores de los Rioni con sus estandartes, los jinetes a caballo, el Capitano del Popolo, los participantes de los grupos históricos de las ciudades vecinas y, por último, la carroza triunfal, tirada por una pareja de bueyes blancos, que lleva en triunfo el preciado «Palio».

Galleta Sant’Anselmo

El Biscotto di Bomarzo se denominaba antiguamente «Pan de San Anselmo». Era pan dulce que Anselmo, entonces obispo de la ciudad, repartía a pobres y peregrinos camino de Roma. La tradición se perpetúa hasta nuestros días y pervive como signo de celebración en honor de la patrona. El procedimiento de preparación es largo y minucioso: los días 24 y 25 de abril de cada año, las amas de casa de Bomarzo se afanan en mil preparativos, ante todo la «búsqueda de la levadura», que debe ser estrictamente natural, ya que es el secreto del éxito del Biscotto.